
Neurocosmética para el bienestar de la piel y el cerebro

Hay una estrecha conexión entre la piel y la mente, un vínculo profundo que siempre ha fascinado a la comunidad científica y a los expertos en belleza. El cuerpo, de hecho, responde al estado mental de maneras sorprendentes, por ejemplo, manifestando erupciones cutáneas o sensaciones de tensión en la piel. La piel, de hecho, es un órgano maravilloso y complejo que gestiona la relación entre nosotros y el mundo exterior y nos proporciona la información necesaria para conocerlo mejor.
La piel posee una estructura dinámica, en continua transformación y que cambia con el paso del tiempo junto a nosotros y se adapta a nuestros hábitos y al entorno. La piel y el sistema nervioso están profundamente conectados, el sentido del tacto que se percibe a través del contacto y por lo tanto la piel es un precursor de sensaciones y por ende de emociones y por esto la piel se presenta como una extensión del sistema nervioso central. Por esta razón, muchísimas condiciones de la piel pueden derivar de un malestar psicológico. No es casualidad que muchas reacciones como la dermatitis o la sequedad cutánea pueden tener causas psicosomáticas.
En este contexto surge la neurocosmética, una rama de la dermocosmética que trae consigo promesas de belleza y bienestar que van mucho más allá del concepto tradicional de skincare, una forma nueva y más atenta de cuidarse pensando en un enfoque global.
El concepto de neurocosmética no es demasiado innovador: data de principios de los años 2000 y se define como el uso de productos para el cuidado de la piel bioactivos, diseñados para operar a nivel neurológico.
Los productos neurocosméticos son particularmente indicados para combatir el estrés a nivel cutáneo y actuar contra los signos del envejecimiento prematuro, esto se debe a que la industria moderna de la cosmética realiza múltiples estudios en busca de ingredientes altamente funcionales que puedan mejorar las interacciones entre la piel y el sistema nervioso.
La neurocosmética se inscribe dentro de un enfoque holístico de la condición de la piel y a través de esta nueva rama de la cosmetología se pasa progresivamente de una visión sectorial de los diferentes órganos considerados como independientes, a una visión global de la amplia red de hormonas, citoquinas y neuropéptidos que conectan estrechamente mente y cuerpo. Piel, sistema nervioso y sistema inmunitario están integrados en una única red.
¿Cómo actúan los neurocosméticos?
La relación piel/sistema nervioso ha sido durante mucho tiempo descuidada, pero hoy representa uno de los campos de estudio más interesantes de la biología cutánea. Los productos neurocosméticos representan una herramienta de cuidado muy eficaz capaz de hacer de puente entre el mundo de la cosmética tradicional y los descubrimientos más recientes en el campo neurológico. Gracias al estrecho vínculo de la piel con el cerebro, hoy es posible experimentar formas innovadoras de estimular la piel y mantenerla sana y hermosa.
El aspecto de la piel es sinónimo de buena salud, de bienestar y el producto cosmético tiene como objetivo preservar el bienestar en el tiempo y se utiliza precisamente para eliminar la barrera entre belleza y salud. Las formas cosméticas son múltiples y cada una de ellas corresponde a una función, entre las que se incluye la mejora de un específico defecto estético de la piel.
Por su parte, los productos neurocosméticos han superado el concepto de cosmética tradicional ya que son capaces de influir químicamente en la conexión piel-cerebro.
Los neurocosméticos representan una verdadera revolución en el mundo de los cosméticos. Se trata de productos que se aplican sobre la piel y que presentan actividad sobre el sistema nervioso cutáneo o, en general, efectos sobre los mediadores cutáneos. Los neurocosméticos permiten combinar ingredientes funcionales de origen natural con la investigación científica. Los consumidores de hoy son exigentes y buscan productos naturales, ecológicos y, sobre todo, que posean una eficacia de tipo funcional.
La piel, como hemos visto, posee un sistema de vigilancia de los cambios ambientales y de la percepción del entorno y produce estímulos que se transmiten al sistema nervioso a través de mediadores.
Estos agentes pueden ser neurotransmisores: se trata de mensajes químicos producidos por las células de la piel como queratinocitos, melanocitos o fibroblastos. La liberación de neuromediadores puede ser inducida por estímulos físicos, químicos o emocionales.
Los ingredientes neurocosméticos pueden actuar según diferentes mecanismos:
- directamente en las terminaciones de las fibras nerviosas cutáneas como moduladores de los neurotransmisores;
- o modulando las funciones de las células o de los receptores.
Existen muchísimos ingredientes funcionales capaces de realizar acciones neuromodulatorias, como por ejemplo los péptidos biomiméticos o algunos extractos vegetales. Estos ingredientes permiten obtener beneficios específicos en la piel, como combatir el estrés y la respuesta oxidativa y, por lo tanto, retrasar el envejecimiento cutáneo.
Además, el mundo del skincare siempre ha estado orientado hacia la búsqueda del bienestar y de la placentero. Las formulaciones pueden ofrecer una placentera experiencia sensorial, así como el packaging y el ritual de skincare que se repite diariamente. Los cosméticos forman parte de nuestra rutina de belleza, nos permiten recuperar la confianza en nosotros mismos, más autoestima y, por lo tanto, bienestar.
Combatir el estrés con neurocosméticos
Además de mejorar las condiciones de la epidermis, la neurocosmética es capaz de ofrecer a quienes la prueban una sensación general de bienestar, una agradable experiencia sensorial del propio producto y un compromiso mental y emocional de calidad.
En el caso de la neurocosmética, se trata de resultados tangibles que pueden revolucionar el concepto de rutina de belleza y transformar el cuidado de la piel en un verdadero ritual de placer y autocuidado.
En la vida cotidiana estamos abrumados por el estrés psicológico, pero existen factores de estrés físicos como:
- contaminación
- los rayos UV
- La luz azul
- la falta de descanso
- las preocupaciones generales
Si la situación de estrés se prolonga en el tiempo, por ejemplo, si se vive en una ciudad muy contaminada o si no se duerme lo suficiente, las células nunca interrumpen la producción de cortisol, es decir, la hormona del estrés y esto produce consecuencias en cadena, por ejemplo, la ruptura de la homeostasis cutánea induce un estado de inflamación que se refleja en un aspecto cansado.
Los neurocosméticos pueden actuar restaurando el estado de homeostasis de la piel a través de un mecanismo de retroalimentación.
Un alto nivel de cortisol tiene varios efectos en la piel:
- Activa el nivel de glicación que daña el colágeno y la elastina. Como resultado, la capacidad de la piel para repararse se ralentiza.
- Ocurre la degradación de las proteínas dérmicas.
- Sequedad cutánea excesiva debido a la pérdida de producción de ácido hialurónico, sequedad asociada a una pérdida de agua transdérmica.
- Comparsa de signos como líneas y arrugas finas debido a la reducida funcionalidad de la barrera cutánea.
Una estrategia clave para el bienestar de la piel reside en las β-endorfinas, péptidos neurotransmisores producidos a nivel del sistema nervioso central que inducen la analgesia, es decir, la ausencia de dolor. En particular, las β-endorfinas actúan sobre los receptores opioides y estimulan los centros del placer en el cerebro generando sensaciones de euforia. Los receptores de β-endorfinas se expresan en las células de la piel y pueden acelerar la regeneración de la piel y la curación de las heridas y en conjunto mejoran el aspecto cualitativo de la piel.
Los laboratorios LeLang han seleccionado el ingrediente Neurophroline™ para la creación de una línea de productos neurocosméticos indicados para el bienestar de la piel. Producido a partir de las semillas de Tephrosia purpurea, Neurophroline™ está diseñado para combatir los efectos de las múltiples fuentes de estrés presentes en la vida cotidiana.
En detalle, Neurophroline™ actúa reduciendo la producción de cortisol por parte de las células cutáneas (-70% en 2 horas, in vitro) y estimulando la liberación de β-endorfina (+163% en 24 horas, in vitro).
Se ha demostrado también la eficacia in vivo de Neurophroline™: en un plazo de 2 semanas, los voluntarios han recuperado el color y la luminosidad de la piel y se han reducido visiblemente los signos del estrés después de un mes de uso, incluyendo ojeras, bolsas debajo de los ojos y enrojecimientos. Neurophroline™ puede ser utilizado para formular cremas y productos antienvejecimiento, sérums y productos para modelar el cuerpo como cremas para el cuerpo y exfoliantes.
Essentia Spa: la primera línea de LeLang basada en la neurocosmética
Essentia Spa abraza el concepto innovador de neurocosmética. La línea Essentia Spa está diseñada para infundir un profundo placer sensorial y lograr una mayor implicación de la mente además del cuerpo, todo en perfecta sinergia.
Essentia Spa, además de un conjunto de aceites esenciales estimulantes del bienestar, contiene ingredientes funcionales como el Tephrosia Purpurea* que tiene la capacidad de reducir el estrés cutáneo y de promover una sensación de bienestar total.
Este ingrediente, inspirado en la neurocosmética, ha demostrado una reducción del 70% en la producción de cortisol en las células de la piel en solo dos horas. Además, activa la liberación de un neuropeptido calmante natural y estimula la síntesis de beta-endorfinas. De este modo, contribuye a hacer que la piel brille y a transmitir sensaciones de placer y relajación.
A través de la nueva línea de cosméticos Essentia Spa, LeLang se confirma a la vanguardia en el campo del cuidado de la piel. A través de una constante investigación y un compromiso hacia la innovación y el bienestar natural, LeLang ha ideado una línea que no solo ofrece productos, sino experiencias que enriquecen la vida cotidiana de las personas.
Essentia Spa se compone de productos neurocosméticos diseñados para obtener el máximo beneficio en la piel y también en la mente, indicados para todo el cuerpo.
Bibliografía: https://www.mdpi.com/1191900